Otro día más amanece,
Una vez más tu no estás presente.
Desearía poder optar por tu presencia
a mi lado,
tanto en invierno como en verano
Sentir tu aliento en mi nuca
sentir que no se acaba nunca,
que me quieres más que nada
que vivimos un cuento de hadas,
tu eres el principe
y yo la princesa encantada.
Es demasiado pedir,
la triste realidad no supera más que
con creces la ficción,
en este mundo de guerras, en el que no
existe el verdadero amor.
Un paisaje desolado,
un corazón abandonado
al cruel paso de los años.
Que malditos sueños
en los que son contenidos
los te quiero robados.
Los dias de llanto el diario los relata
con más precisión de la jamás
lograda.
La mente liberada viaja por el desierto
de mi imaginación
solamente queda en el corazón
un tú soñado y un presente y
solitario yo.
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